Estas Navidades apaga el móvil
23/12/2018
Llegan las fiestas navideñas, una época llena de celebraciones y de ilusión. Comidas, cenas, año nuevo, amigo invisible, reencuentro con los amigos o eventos de empresa.Tanto si nos encontramos en un momento feliz o difícil, tanto si nos gustan o no estas fiestas, ha llegado la Navidad y con ella la búsqueda de los mejores regalos y los mejores looks.
¿Para impresionar a quién? Lamentablemente esta época del año suele regirse sobre todo por las apariencias, con derroches consumistas que no traen más que una sensación efímera.
¿En que se ha convertido nuestra Navidad? Últimamente una gran cantidad de personas se sienten solas durante estas fechas sobretodo porque escasea el contacto real y la falta de tiempo para pasar con los seres queridos.
Pensamos en las fotos que vamos a hacer para colgar en nuestras redes sociales, vemos como se viven otras navidades diferentes a las nuestra o estamos pendientes en todo momento de las notificaciones y los likes, perdiéndonos lo que realmente esta pasando a nuestro alrededor.
Estamos conectados con millones de individuos a través de las redes sociales, pero no recibimos ni un solo abrazo de una de ellas. Nos hemos olvidado de los beneficios tanto para la salud física como mental que conlleva un contacto cercano y cálido.Es importante señalar que diversos estudios han demostrado que el tacto y la ternura ayudan a disminuir el estrés, la ansiedad, el dolor y la soledad.
Basta una mirada, una palabra o escuchar, pequeños gestos que a veces pasamos por alto en estas fiestas. Nos encerramos en nuestro mundo sin aprovechar la oportunidad que la Navidad nos brinda, experimentar el beneficio del contacto.
En estas fiestas, cuando estés reunido con la familia o con amigos, intenta no consultar el móvil, ni ver vídeos, no estés pendiente de las notificaciones. Tomate tu tiempo disfrutando del contacto, de la compañía, de las miradas cómplices y de cantar canciones con los demás. No hace falta compartir nada en las redes sociales, no hace falta pensar en hacer fotos, comparte tus emociones con los presentes.
Vamos siempre deprisa, sin tiempo ni para nosotros ni para los demás, aprovechemos las Navidades para darnos un respiro. Para nutrirnos de este bálsamo emocional al escuchar y ser escuchados, al mirar y ser mirados.